Wake me up when September starts, Pt. II: IT'S QUINCENA TIME!

Hasta hace un año, mi vida se caracterizaba por traer cambios en el mes de septiembre, pero en 2009 el destino se me adelantó y desde agosto comenzaron a pasarme montones de cosas. No es que me guste la rutina o seguir patrones, pero son cosas que no se pueden evitar y así como hace un año, el mes que está por terminar ha sido de los más ajetreados en lo que va del año: tuve como veinte mil depresiones, encontré trabajo (pasando así de fisicoculturista a panzón chelero por el cambio de hábitos) y hasta me he animado a hacer cosas que hace doce meses ni de chiste se me habrían ocurrido, y lo hice just for da lulz además encontré los ojos más bellos del mundo.

OK, enlistándolo así no son tantas cosas, pero el simple hecho de abandonar el desempleo pone de cabeza toda una vida: de estar echado en casa pasé a estar en chinga por toda la ciudad y aunque suene trillado, en el ratito que llevo aquí he aprendido más sobre el Derecho que lo que aprendí durante cinco años y medio en la Facultad de Derecho. También está el hecho de que he cambiado de ambiente y con ello, conocido a nuevas personas, sin mencionar que ahora mi tiempo libre y con él mi vida social brillan por su ausencia. Y por supuesto, ya no soy un mantenido.

Mis ojos me arden, mis piernas me duelen y hago corajes en toda clase de dependencias gubernamentales. Pero creo que vale la pena. En especial porque ya llegó la quicnena, y con él mi primer pago (me acaban de pagar, hace menos de 10 minutos que recogí mi dinerito). Y lo voy a despilfarrar. Me lo merezco, ¿no?

Quienes me conocen saben que soy una persona ahorrativa, rayando incluso ser codo, pero vamos, es mi primer sueldo, necesito celebrarlo: mi primer día estaba cagándome de miedo. Sobreviví a mí mismo y ello merece por lo menos un día de desmadre y un videojuego nuevo.Ya la siguiente abro mi cuenta de ahorros e inicio mi plan de vida adulta.

En fin, volviendo al tema, parece ser que agosto se ha convertido en el mes de los grandes cambios. Así como julio es el mes en el que comúnmente salen los éxitos de taquilla en el cine y octubre es el mes en el que U2 suele lanzar sus álbumes, agosto se perfila para ser el mes en el que comiencen los nuevos ciclos en mi vida.

Me despido, y para aquéllos que todavía me leen (¡muchas gracias por ello!), sonrían que la vida no se ha acabado. Atentamente: su depresivo y amargado de cabecera, Juan Banana.

P.D.: Además, el título de la entrada queda bien. Me voy a ver a Greenday (si las cosas salen bien, of course).