domingo, 27 de septiembre de 2009

Piedras azules



¿Quién no ama a los Rolling Stones? Son -dicen- la banda de rock más grande sobre la Tierra, y sus canciones son leyendas de la edad contempóranea. "Satisfaction", "Paint it Black", "Sister Morphine", "You Can't Always Get What You Want", "Wild Horses", "It's Only Rock and Roll" y "Start Me Up", son piezas clave de nuestra cultura que han contribuido a moldear el mundo en el que nos desarrollamos. El rock no sería el mismo sin ellas: desde Aerosmith hasta los Kings of Leon y de Bon Jovi a los Black Crows deben su existencia a las canciones que he mencionado.

Además de haber sido escritas por Mick Jagger y Keith Richards, ¿qué tienen en común las citadas composiciones? Sencillo: todas son posteriores a 1965. Pero los Rolling Stones nacieron en 1962. ¿Qué pasó entonces?

Bueno, antes de ser una empresa de egos (con una lengua por logotipo corporativo) y un cliché del rock and roll, los Rolling Stones eran un grupo de blues. De ahí el nombre de la agrupación, inspirado en la canción "Rollin' Stone" de Muddy Waters. Pero después vino Satisfaction y con ella la llave a las ligas mayores, para lo cual necesitaban un sonido más comercial. No que eso fuera malo, ciertamente nos dieron obras maestras en los años venideros. Sin embargo, a cambio pagamos el precio de olvidar sus tempranos logros.

Los chalanes de un tal Alexis Kornell
La primera encarnación de los Rolling Stones, con Jagger, Richards, Brian Jones y Dick Taylor (quien posteriormente formaría parte de The Pretty Things) se llamaba ni más ni menos que Little Boy Blue and the Blue Boys, díganme si eso no fue un acto bluserísimo. Posteriormente el cuarteto, gracias a contactos de Brian, se uniría a Blues Incorporated, legendaria bigband de blues comandada por Alexis Kornell (misma que nos legaría también a Jack Bruce y Ginger Baker de The Cream, así como a Long John Baldry), fundada en 1961.

El prestigio de Blues Incorporated creció y finalmente fueron contratados por la BBC para aparecer en televisión. Dicha actuación se llevaría a cabo el 12 de julio de 1962, pero la banda ya tenía agendada esa noche para el Marquee Club, y no podía darse el lujo de abandonar a sus fieles seguidores. Para solucionar el dilema, Kornell se aprovechó del tamaño de su grupo y lo partió en dos: los más capaces saldrían en televisión, y los ejecutantes más modestos permanecerían en el Marquee. Los "perdedores" que se quedaron sin salir en la telera fueron Mick Jagger, Keith Richards, Brian Jones, Ian Stewart, Dick Taylor y Tony Chapman; se hicieron llamar The Rolling Stones. Su interpretación fue lo suficientemente atractiva al público como para reconocerlos como un acto independiente del de Alexis Kornell, separándose definitivamente de él, no sin antes bajarle a su baterista, Charlie Watts, con quien Jagger, Richards y Jones ya habían hecho buenas migas, cuando Chapman dejó el grupo.

Para diciembre del mismo año, ante la salida de Dick Taylor, Bill Wayman se convirtió en el nuevo bajista de la banda y la alineación definitiva del grupo (al menos durante la década de los 60's) quedó consolidada. A partir de aquí tendrían que probar suerte sin más ayuda que la de su propio talento. Afortunadamente tenían mucho.

La vida de Brian
A pesar de ser Mick Jagger el vocalista del sexteto, fue Brian Jones quien llevó las riendas de las Piedras Rodantes durante estos años, y fueron los licks de su guitarra -y no los de Richards- los que les dieron un sonido distintivo.

Bajo este orden de ideas, los londinenses siguieron tocando blues durante mucho tiempo. Inicialmente se limitaron a los covers, ya fueran de standards del género ("I Just Want to Make Love to You" de Muddy Waters, "Walking the Dog" de Rufus Thomas, etc.) o versiones blueseras de éxitos contemporáneos rockanroleros ("Not Fade Away" de Buddy Holy, "Carol" de Chuck Berry, y hasta se aventaron una rola de los Beatles, "I Wanna be Your Man", aunque ésa, más que cover, fue una canción que Lennon y Macca les regalaron).




Si el R&B había hecho que el blues en manos de gente blanca se convirtiera en una fofa e insípida caricatura del género, los Stones le devolvieron su carácter polvoriento, de gente de arrabal. Con todo y sus elegantes trajes, la actitud y pose de los Rolling Stones fue siempre tosca, ruda y a veces un tanto oscura (nada que ver con el narcisista Jagger y el pirotécnico Richards de estos tiempos).

Y llegó la satisfacción
Ya cuando comenzaron a componer sus propias canciones, Jagger y Richards siendo los encargados del aspecto creativo, comenzaron a imponerse sobre Jones, pero todavía conservaron un estilo fuertemente anclado en el género nacido en el sur de los Estados Unidos de América. Fruto de estos tiempos son "Off the Hook", la genial "Congratulations" y la instrumental "Stoned" (probablemente la primera canción de rock psicodélico de la historia).

Inclusive ya en los albores de la era Saticfaction, Jagger, Richards y compañía conservaron un cierto amor al blues. En esa época los sencillos eran discos físicos que se vendían y podían fácilmente conseguirse en las tiendas (a diferencia de hoy, en que más bien "sencillo" es un simple eufemismo para decir "la canción promocional para la radio" que rara vez se vende y en tal caso es objeto de culto sólo para fans from hell y coleccionistas), y quienes hayan comprado el sencillo "(I Can't Get No) Satisfaction" hace 44 años, se habrán llevado una grata -o quizás no- sorpresa al darle vuelta al disco.

Si el single fue comprado en el continente europeo, el lado B de la canción era "The Under Assistant West Coast Promotion Man", uno de los blues más pegajosos de la historia, y el debut de los desplantes histriónico-musicales de Mick Jagger (escuchar las improvisaciones del final de la canción, todo un tour de force). En el nuevo mundo, el lado B de Satisfaction era "The Spider and the Fly", mi canción no famosa favorita de los Stones (por ella me hice fan, se los juro). Esta canción es una joya de la música contemporánea, desde su cadenciosa introducción (como todo en los primeros tiempos de las Piedras, la canción grita sexo), pasando por su gandalla letra y coronándose con la metáfora de la araña que caza a una mosca al mismo tiempo que nos deja con la duda: ¿quién es la mosca y quién la araña en esta sensual historia? Así es, señores, han vivido casi medio siglo engañados: olvídense de Satisfaction, la verdadera cumbre de los Rolling Stones en la década de los 60's se llama The Spider and the Fly.






Sí en 1965 Bill Wyman hubiera muerto de sida, Keith Richards se hubiera vuelto loco de un pasón y un desconsolado Mick Jagger hubiera entonces disuelto el colectivo para dedicarse a la contaduría (como intentó en un principio), aún así yo sería fanático de las efímeras Piedras Rodantes, el mejor grupo europeo de blues. Hago una súplica para que revaloremos sus tempranas obras y descubramos el opacado pero igualmente espectacular legado de esta bandota. Amén.

2 comentarios:

The retro girl dijo...

copión!!!

XD

no cabe duda de que las piedras siguen provocando fascinación... incluso aunque ya ni hagan nada...

tienen su legado asegurado y son de las mejores bandas de todos los tiempos!!!

(lástima que no se hayan podido ver los videos) :(

Charro Negro dijo...

no cabe duda que lo bueno sigue siendo lo viejo, pero no las viejas, esas son pasas, pero los grupos regresan y estos ancianos siguen en pie, para mi que ya son momias que caminan con tecnologia alemana, nadie me engaña!!!